EL PROTOCOLO DE COMPORTAMIENTO EN LA MESA. PRIMERA PARTE.

 

La invitación.

Al recibir una invitación para almorzar o para cenar, debemos responder sin demora, y utilizando la misma vía de comunicación que ha utilizado la persona convocante. Las invitaciones formales, más personales, se suelen realizar mediante tarjetas escritas a mano, y un caballero debe saber responder de la misma manera. Es también lo más elegante.

Si padecemos alguna intolerancia a algún alimento, debemos realizar una llamada telefónica advirtiendo a la persona anfitriona. Si estamos obligados a seguir una dieta muy estricta o muy especial, quizás lo mejor sería declinar la invitación, ya que podríamos complicar enormemente a la persona anfitriona la confección de diferentes menús para satisfacer cada particularidad que pudiera indicarle el resto de invitados.

Indumentaria.

En la convocatoria a un evento se suele indicar el código de vestimenta.

Si se trata de una comida de negocios, lo correcto es un traje.

La cena de Nochebuena es una celebración familiar. Lo correcto en este caso es un traje oscuro.

La cena de Nochevieja, tomar las uvas y, o, el cotillón posterior, es una celebración informal, no necesariamente familiar. El atuendo apropiado es un esmoquin.

La cena de Reyes, requiere algo más informal. Se puede acudir con americana y pantalones de distinto color, pero es recomendable usar corbata, salvo que consista en una gala de Reyes, en cuyo caso habrá que llevar esmoquin.

Si se trata de una comida informal, se pueden utilizar chinos o incluso vaqueros. La parte superior de nuestro atuendo marcará el “grado de informalidad”.

Puntualidad. 

Un caballero siempre debe ser puntual. Tampoco es correcto llegar demasiado pronto, ya que no debemos sorprender a la persona anfitriona durante los preparativos.

Regalo o aportación al menú.

En comidas o cenas formales, es incorrecto llevar regalo o aportación al menú.

En un evento informal, del tipo: “cena con amigos”, es frecuente distribuirse el menú e incluso las bebidas. Se puede llevar un vino como obsequio, pero será eso, un obsequio, por lo que es incorrecto pedir al anfitrión su descorche durante la comida. También es incorrecto acudir con un plato preparado o un postre no esperados.

Presentaciones.

Corresponde a la persona anfitriona realizar las presentaciones entre sus invitados, indicándoles nexos de conversación que les permitan relacionarse. En el caso de que dicha iniciativa no partiera de la persona anfitriona, debemos auto presentarnos, indicando brevemente nuestra vinculación con la persona anfitriona. Lo correcto, si no se va a pasar inmediatamente al comedor, es que la persona anfitriona ofrezca alguna bebida.

A la mesa.

Seguiremos a la persona anfitriona a la mesa cuando lo indique.

En un almuerzo o cena formal, el anfitrión debería ofrecer su brazo derecho a la mujer de mayor rango o edad y acompañarla a la mesa. Les seguirían el resto de invitados, cerrando la entrada la anfitriona.

Colocación en la mesa.

Presidencia Inglesa.

En una mesa alargada, la presidencia debe ser la cabecera de la mesa (una de las puntas) más alejada de la puerta. Su pareja se situará en la punta opuesta. El hombre de mayor rango o edad, se situará a la derecha de la anfitriona. La mujer de mayor rango o edad, se situará a la derecha del anfitrión. El siguiente caballero en rango o edad, se situará a la izquierda del anfitrión, la siguiente mujer en rango o edad, se situará a la izquierda de la anfitriona, y así sucesivamente, según él esquema:

Presidencia francesa.

Para la distribución de los puestos se utiliza el mismo criterio que en la presidencia inglesa, alternando hombres y mujeres, pero los puestos de mayor importancia o rango están en la parte central de la mesa, procurando que la presidencia esté en el lado opuesto a la puerta o a la ventana principal.

Éste es el tipo de presidencia oficial en España desde la llegada al trono de los Borbones.

Normalmente, en ambas disposiciones, los matrimonios no se sientan juntos, sino, más bien, enfrentados, salvo en el caso de una boda, en la que los novios deberán sentarse juntos.

Tanto en el caso de presidencia inglesa como francesa, y cuando el invitado que se recibe es de un rango muy relevante, es posible ceder a dicho invitado la presidencia de la mesa, correspondiendo en este caso al anfitrión el puesto a la izquierda de la presidencia.

Tarjetas y puestos.

En eventos formales se utilizan tarjetas con el nombre del comensal para indicar su puesto. Se colocan centradas en la parte superior de la composición.

Son especialmente útiles en las mesas con forma redonda, en las que puede resultar más complicado ubicar la presidencia.

El puesto de cada comensal, deberá tener una anchura mínima de sesenta centímetros, para que éste pueda desenvolverse con cierta holgura y comodidad.

Los teléfonos móviles.

Se mantendrán desconectados y guardados en el bolsillo durante la comida. Si esperamos una llamada urgente, (de extrema necesidad…) y nos encontramos en un entorno familiar,  pediremos disculpas por dejar conectado, en modo vibración, nuestro teléfono, avisando al resto de los comensales de lo inaplazable de la llamada que esperamos. Al recibir la llamada se volverá a pedir disculpas, atendiendo la llamada en estancia aparte del resto de comensales, donde no puedan oírla. Al volver a la mesa volveremos a excusarnos. No es correcto atender llamadas en un evento formal.

Nos sentamos.

No nos sentaremos hasta que las mujeres que nos rodean lo hayan hecho. Es un gesto de cortesía arrimarle la silla al sentarse. Y nos levantaremos si ellas se levantan.

Nos sentaremos erguidos. Con la espalda recta, no nos dejaremos caer en el respaldo, ni nos inclinaremos hacia la mesa. Los cubiertos llevan la comida a la boca, y no al revés. Debe haber la misma distancia entre nuestro cuerpo y la mesa que entre nuestra espalda y el respaldo de la silla. Procuraremos arrastrar la silla lo menos posible para lograr esa distancia ideal.

Apoyaremos en la mesa nuestros antebrazos, nunca los codos. Nuestras manos siempre deben de estar a la vista.

Ayuda a los anfitriones.

Salvo que el anfitrión o la anfitriona nos lo demande, y siempre que se trate de un evento informal, no debemos ayudar a los anfitriones en la organización del servicio.

En la siguiente entrega de este artículo hablaremos de la mesa y de los elementos que la componen.

Mr. Mycroft.